Humorismo

Vivimos en un país de chiste, y así nos va. Para lo bueno y para lo malo. Así, existe una gran tradición de humoristas y muy especialmente de humoristas que se dedican al humor surrealista, ese que sólo se desarrolla a orillas del mediterráneo, en países como Italia o España y que ha dado grandes genios como Tono, Ugo Tognazzi, Gila, Tip y Coll, Leo Bassi o Faemino y Cansado.

Bueno, pues recientemente se les ha unido un grupo que les ha superado en audacia, atrevimiento y capacidad de ruptura con la realidad. Se trata de ETA. Esa panda de hijos de la gran puta han decidido que asesinato y humor no tienen por que estar reñidos, y han tenido la surrealista idea de reivindicar un atentado con dos muertos, a la vez decir que el "alto el fuego" sigue vigente (otra joya del humor surrealista esto del "alto el fuego"), afirmar que el objetivo del atentado no era causar víctimas (y yo me pregunto para qué coño entonces revientan un edificio entero), y echar la culpa de las víctimas a otros. Y de paso no tienen ningún reparo en acusar a Gobierno Español y PSOE de "poner obstáculos sin cesar al proceso democrático". Fijaos que tonto soy, que yo pensaba que eran las bombas y los tiros en la nuca los obstáculos para los procesos democráticos. Pero claro, seguramente mi concepto de democracia dista mucho del de ellos. O quizás me falta ese sentido del humor de que ellos hacen gala en sus comunicados para entenderles.

Irónicamente es cierto que el PSOE pone obstáculos al proceso democrático, pero no al que ellos dicen, sino a la democracia interna del partido, inexistente.

Tenemos en este país de chiste otros humoristas como el propio presidente que llama accidente a un salvaje atentado con víctimas mortales; como la vicepresidenta primera que llama papelito a un pacto contra el terrorismo que parecía dar ciertos resultados (en el peor de los casos mucho mejores resultados que este servilismo borreguil del Gobierno hacia los asesinos), o como la presidenta de la Comunidad de Madrid que, en otro orden de cosas, afirma que no hay listas de espera en la sanidad pública madrileña (esta si que es buena).

Desconozco si el gobierno ha hecho concesiones a los asesinos o no. Desconozco si estaba dispuesto a hacerlas. Lo que sí sé, es que si no las hecho ni estaba dispuesto a hacerlas, la han cagado bien, pues la mitad de la población de este país cree lo contrario. Si las han hecho también la han cagado bien, pues les han tomado el pelo como a chinos, se han cachondeado de ellos de la manera más macabra que podían y el rendimiento político que van a sacar es negativo. Y todo esto también tiene su gracia. El humor domina la vida en este país de chiste. El humor surrealista... y negro.

La vida es bella.

El Vehemente.